La recomendación de los especialistas es de al menos 600 cc por día, pero en el país se consumen 340.

Consumir calcio es fundamental a lo largo de toda la vida. Y la fuente por excelencia de ese nutriente son los lácteos, que además aportan fósforo y vitamina D, claves para que ese calcio se asimile. Por eso, y por sus proteínas, los especialistas en Nutrición consideran fundamental su presencia en el desayuno y en la merienda, en cantidades abundantes.

«Los lácteos son los alimentos que más calcio nos aportan, y en una relación adecuada con otros nutrientes. Por eso los necesitamos«, afirmó Silvio Schraier, ex presidente de la Sociedad Argentina de Nutrición.

Y graficó: «Un adulto promedio debería tomar al menos dos vasos de leche o yogur por día, más un trocito de queso semiduro (como cuartirolo y por salut) del tamaño de una cajita de fósforos de bolsillo, o unas tres fetas del queso que se vende feteado».

«Los lácteos son, junto con las verduras y las frutas, el grupo de alimentos que más incide en que una dieta sea de calidad y saludable. Son además la única fuente relevante de calcio en nuestro patrón alimentario: dos tercios del calcio ingerido provienen de ahí y un desayuno con leche o yogur aporta no menos de la mitad del calcio lácteo«, aseguró Sergio Britos, director del Centro de Estudios sobre Políticas y Economía de la Alimentación (CEPEA), donde recomiendan tres vasos diarios de leche (o potes de yogur).

Sin embargo, la gran mayoría de la población está muy lejos de estas cantidades. Una investigación del CEPEA publicada hace dos años halló que la dieta promedio argentina incluía entonces sólo 340 centímetros cúbicos diarios de lácteos. Esto es poco más que la mitad de los 600 cc. al día que ellos recomiendan para llevar una dieta «saludable».

El calcio, afirman, es clave para desarrollar y mantener huesos fuertes, con buena densidad, pero hoy se le conocen muchos más beneficios. «Se ha probado -contó Britos- que previene la hipertensión arterial, la ganancia de peso e incluso la diabetes.»

Fuente: https://www.clarin.com